tag:blogger.com,1999:blog-32796015.post3207514935745510949..comments2023-03-11T16:40:33.255+01:00Comments on EL PESO DEL UNIVERSO: COSAS Y CASOS QUE MAL SIENTAN Y PEOR SE SOCORRENAutógenohttp://www.blogger.com/profile/06214413583174233270noreply@blogger.comBlogger12125tag:blogger.com,1999:blog-32796015.post-32516961489179796832008-10-21T23:52:00.000+02:002008-10-21T23:52:00.000+02:00Aparte de algunas expresiones que me han encantado...Aparte de algunas expresiones que me han encantado..., y para no alargar más la cuestión, decirte que <B>estoy de acuerdo en tu final sobre Adán y Eva</B>. Sólo tenemos un pequeño "problema": ambos, tú y yo, estamos <I>juzgando</I>, valorando a Dios -es evidente que les metió en un callejón sin salida...-, porque imagina que dejar a un solo hombre -cómo no empatizar con nuestro antecesor- con una sola mujer..., ¡bendita libertad!, je... Dios aprieta pero no ahoga, dicen los muchos beatos..., ah, vale, ¡gracias Dios!<BR/><BR/>Te hace "hombre" y luego quiere que seas una piedra..., y si no allá tú...<BR/><BR/>Comprenderás que ni tú ni yo tendríamos mucho futuro en un tribunal de iluminados intérpretes de La Luz Divina. Como algunos elementos de la actualidad, no asumiríamos la autoridad del tribunal, pero de poco nos valdría.<BR/><BR/>Dios nos pille confesados, porque volvería a pecar...<BR/><BR/>Amén.Sensacioneshttps://www.blogger.com/profile/15835383593350600351noreply@blogger.comtag:blogger.com,1999:blog-32796015.post-85745834146616291322008-10-21T17:51:00.000+02:002008-10-21T17:51:00.000+02:00Sensaciones, antes de nada aclarar que lo de biemp...Sensaciones, antes de nada aclarar que lo de <I>biempensante</I> no ha sido fruto de una reacción contra alguna sugerencia de tu cosecha (descansa en este punto, amigo), como tampoco la dicotomía, puramente instrumental, entre conductas lesivas y bondadosas; considéralo un introito a base artillería ligera para apuntar hacia una genealogía de la imaginación como una facultad que se ve potenciada y retroalimentada por el ejercicio de lo que comúnmente se ha considerado <I>malevolencia</I>. Por contaste, aclarar también que desde mi punto de vista la falta de imaginación se encuentra en el origen de no pocos males que azotan al hombre moderno. En esto, creo, compartimos diagnóstico.<BR/><BR/>En cuanto a la relación entre fe y desesperación al hilo del terrorismo, tú mismo has colocado las piezas, pero te ha faltado unirlas: la fe es la forma suprema de desesperación, es el salto (recuerda a Kierkegaard) que lleva al desesperado a abrazar ciegamente una ilusión, cualquiera que rellene con remedos de experiencias absolutas sus vacíos. Sin embargo, en mi comentario, cuando critiqué tu asimilación del terrorista al tipo "que nada espera", lo hice pensando más bien en el escéptico capaz de cuestionarlo todo y a todos, en el desesperado incluso de su desesperación, en el individuo que "no se casa con nadie" a pesar de las tentadoras ofertas que brindan los clásicos sistemas de creencias (dios, raza, clase, ciencia, democracia, etc) o, en su defecto, los sucedáneos que operan como sistemas de inercia (ideología publicitaria, narcisismo, fiestismo, etc).<BR/><BR/>Por último, sobre tu exposición de la dialéctica entre libertad y necesidad anotar que formalmente me parece impecable, aunque nada reveladora. No me detendré en este tema, pero si bien es obvio que a nivel existencial uno es más libre a medida que menos necesita, no lo es tanto hasta qué punto. ¿No podría ser la libertad un subproducto de la necesidad? ¿El más refinado grado de determinismo? ¿Una coartada para vivir <I>como si</I> fuéramos réplicas de la divinidad?... He escrito en otro sitio sobre las paradojas que rodean al pensamiento del azar y la necesidad, así que me da pereza construir de nuevo esa secuencia lógica: excúsame por no ser elocuente. A modo de colofón, lo que sí te diré es que el "cordero" (animal simbólico) no está excusado de ser una de las peores bestias por sus insignificantes dotes volitivas, sino que precisamente es "peor" por esta carencia de voluntad. Sirva este ejemplo para dejar claro que al menos existen dos criterios fundamentales en el asunto que nos ocupa: la libertad como requisito de culpabilidad opuesta a la libertad como intrascendencia de la culpa. Adán y Eva, ¿podían realmente no pecar? Puede que el único pecado de Adán y Eva sea haber cedido al engaño de estar cometiendo un pecado; puede que de haber sido libres, nunca hubieran tenido necesidad de pecar.<BR/><BR/>PS: Ese ojo, además de mirarte, te acompaña.Autógenohttps://www.blogger.com/profile/06214413583174233270noreply@blogger.comtag:blogger.com,1999:blog-32796015.post-9896774580021912002008-10-21T16:00:00.000+02:002008-10-21T16:00:00.000+02:00No entiendo la primera parte, eso de que "no eres ...No entiendo la primera parte, eso de que "no eres <I>biempensante</I>. Quiero decir que no veo donde he sugerido yo esa división de lo "dañino" y lo "bondadoso". No creo haber hecho esa división. Hablaba de "libertad" y, sí, ligué tu visión de la libertad con los terroristas islámicos -sólo es un ejemplo tristemente actual, pero puedo dar muchos más-.<BR/><BR/>En la segunda parte, bueno, creo que la "fe" por sí misma hace poco, y que es más la <I>desesperación</I>. La "fe" actúa como catalizador, yo creo. A lo que iba es que -lo mismo que cualquier reacción <I>"irracional"</I> contra la propia vida...-, la <I>necesidad</I> conduce a la sumisión -no a la libertad-, sea sumisión a una idea "divina", "superior" -la raza, el dios, la "ciencia"...-. Para el que se tome la Ciencia como un dogma, aquélla le <I>conducirá necesariamente</I>, le obligará -a reciclar, a reprobar, a "salvar" (al fumador, etc.)...-.<BR/><BR/>No digo que no se puedan hacer acciones extremas <I>en libertad</I> -por ejemplo la guerra..., o el suicidio-. Digo que el <I>grado de libertad</I> es inversamente proporcional a la <I>necesidad</I>. Cuando voy al trabajo porque <I>lo necesito</I>, mi libertad es menor que cuando lo hago porque me gusta sin que me haga falta para "sobrevivir"...<BR/><BR/>Lo <I>"esperanzado"</I> (en el Paraíso) de un fanático es pura psicología -el Paraíso está en su mente, no podemos decir más-. La <I>desesperanza</I> que yo les atribuyo es <I>real</I>, creo yo, es evidente, aunque <I>indisolublemente</I> unida a su interioridad, claro. Claro que no son incompatibles, pero yo hablo de "libertad", es decir, una idea filosófica, no de "sentirse libre", que, como decía Unamuno, "acaso también, por dentro, un cangrejo resuelva ecuaciones de segundo grado". Uno puede sentirse "Alicia en el país de las maravillas", pero la realidad, bueno, sobre eso tratamos de hablar, pensar, razonar, ligado todo ello, por supuesto, al sentimiento -en esto no hay elección, no somos máquinas-.<BR/><BR/>Una persona con <I>depresión</I> -o con delirios, etc.,-, si se suicida <I>no lo hace en libertad</I>. Esto no quita que una persona pueda <I>decidir</I> hacerlo. Según la capacidad de decisión que tenga, es decir, de las opciones que tenga, tendrá mayor o menor libertad.<BR/><BR/>Una persona con tetraplejía, puede decidir que quiere morir. ¿Libremente? Sólo dentro de un estrecho cauce. Sería más libre si, además, pudiera utilizar las manos, etcétera... Hay grados de libertad, y estos pueden ir condicionados desde fuera.<BR/><BR/>Desde luego, siguiendo la última frase del primer párrafo, "un cordero puede ser la peor bestia", y la mejor. No tiene apenas libertad. Sin ésta, insisto, no cobra sentido ni la idea de bien, ni la de mal. No cabe "biempensar" ni "malpensar", sólo es necesidad.<BR/><BR/>Si Adán y Eva no hubieran tenido libertad, no habrían pecado...<BR/><BR/>No sé si me explico, Autógeno.<BR/><BR/>PD: ¿quieres dejar de mirarme tan fijamente por ese ojo?..., coartas mi libertad ;), ja.Sensacioneshttps://www.blogger.com/profile/15835383593350600351noreply@blogger.comtag:blogger.com,1999:blog-32796015.post-49207599250277316002008-10-21T07:54:00.000+02:002008-10-21T07:54:00.000+02:00Lo siento, no soy un biempensante. Si nos ponemos ...Lo siento, no soy un <I>biempensante</I>. Si nos ponemos a categorizar los impulsos, actitudes y otros fenómenos psíquicos en dos grandes parcelas definidas por lo dañiño y lo bondadoso, entonces la imaginación es un atributo maldito, pues el <I>mal</I> ha sido y es uno de los más poderosos estímulos para el ser humano. Ya lo decía Camus con mejores palabras, nada más prolífico que el mal. Los menos imaginativos, los "brutos", son también, por tanto, los más mansos, los más obedientes, los más sumisos, es decir, los que tal como apuntas acatan el dictado del momento por absurdo que sea y postulan al hacerlo su escasez de miras. Quizá la peor bestia sea el cordero.<BR/><BR/>Tu razonamiento, que suele abundar en asociaciones interesantes, te ha llevado a sugerir una similitud entre <I>el que nada espera</I> y el terrorista islámico, comparación que considero errada. Este tipo de individuo (o de hombre masa, ya que citas a Ortega) que mencionas es, que duda cabe, un encadenado, pero ante todo un encadenado por la fe, un fanático de un dogma, un <I>esperanzado</I> por las garantías ultraterrenas de su dios. Cuando el mundo real (o la visión imperante del mismo) se descompone, prosperan los salvadores de toda ralea: forma parte del hedor de la inmundicia. El terrorista, que por otra parte no tiene porque ser un descerebrado (es más bien un infectado por una noción totalitaria del bien), no es el nihilista que proponen analistas tan reverenciados como André Gluksman, sino una reacción contra la nada creciente, alguien que lucha por imponer un criterio más firme y estrecho del principio de realidad con actos tan absorbentes, tan salvajemente "puros", como la masacre de miles de personas.<BR/><BR/>Tengo que ir al trabajo, así que aborto aquí mi discurso. Es un placer debatir contigo.Autógenohttps://www.blogger.com/profile/06214413583174233270noreply@blogger.comtag:blogger.com,1999:blog-32796015.post-15178847324929448752008-10-20T23:46:00.000+02:002008-10-20T23:46:00.000+02:00Bueno, bueno, qué pedazo de respuesta. Es de agrad...Bueno, bueno, qué pedazo de respuesta. Es de agradecer tu actitud, Autógeno. Yo te la agradezco. Tocas demasiados puntos para un momento, así que sólo adelanto que en algunas cosas podemos coincidir, en otras no...<BR/><BR/><B>Para destacar el más potente desacuerdo</B>, te diré que, por el momento, no puedo estar en mayor desacuerdo respecto a lo que dices de que "la auténtica libertad comienza cuando uno no tiene nada que perder..."<BR/><BR/>No concibo mayor desacuerdo entre mi forma de pensar y este punto. En absoluto creo que el desesperado tenga "libertad", ni muchísimo menos. Ni que no temer, siquiera por su vida, sea el fundamento del no va más de la libertad. Antes al contrario: el que no tiene nada que perder está abocado a la nada, al vacío, a la muerte (abocado implica una sola dirección, claro...). Me recuerdas ese comentario que hacía un piloto británico sobreviviente cuando intervino en el hundimiento del Tipltiz -como se escriba, gemelo del Bismarck-, el acorazado alemán de la 2ª Guerra Mundial. Le preguntaban que si no había tenido miedo, y el hombre contestaba que era un tipo sin la más mínima imaginación, y que por ello, no había sentido miedo... Como decimos por aquí respecto a los "brutos": le dices que pase por ahí (una pared), y pasa por ella.<BR/><BR/>Tengo una visión totalmente opuesta a lo que es la libertad en este punto. Como decía Ortega, criticando creo que a Unamuno, "suprema voluptuosidad la de mantener las reglas sin quebrantarlas..." La auténtica libertad exige, desde mi punto de vista, justo lo contrario. Veo al Maestro de aquel Pequeño Saltamontes Verde, ¿te acuerdas?, y veo "la libertad". Miro a un terrorista islámico, y pienso: he ahí un encadenado. Y bien que lo saben los que los manipulan...<BR/><BR/>Saludos.Sensacioneshttps://www.blogger.com/profile/15835383593350600351noreply@blogger.comtag:blogger.com,1999:blog-32796015.post-62452208347101955352008-10-19T22:46:00.000+02:002008-10-19T22:46:00.000+02:00Sensaciones, en primer lugar darte la bienvenida a...Sensaciones, en primer lugar darte la bienvenida al blog y agradecer tus bien matizadas disensiones. Los comentarios críticos me gustan tanto o más que los halagadores.<BR/><BR/>Si partimos de la premisa de la existencia del libre albedrío, la libertad como actitud consciente que busca la eficacia y amplitud de la voluntad implica una administración cuidadosa de los medios y los fines, así como de las relaciones que uno teje y de las circunstancias donde a uno lo enredan... en definitiva, la libertad en tal sentido es inseparable de la responsabilidad; es más, no creo que sea factible vivir con responsabilidad sin la asimilación progresiva de actos que fortalezcan la soberanía personal. Sin embargo, el atributo que pretendes defender cuando hablas de las agresiones que suponen los usos recreativos del propio cuerpo no tiene nada que ver con la libertad, sino con la desconfianza. Una cosa es la anomia, el individualismo cerrado que se alza avasallando a los demás o la simple descortesía, y otra bien distinta el hecho de que la libertad tiende a generar conflictos por que cada uno procura explotarla como puede, gusta o sabe. En libertad, la única regla debería ser que se puedan cambiar las reglas (o que nadie pueda fijar su versión de la regla a costa de imposibilitar otras versiones). Es evidente que si fumo en el cubículo de un ascensor (y conste que no soy fumador), por muy gozoso y liberado que pueda sentirme al hacerlo, estoy no sólo jodiendo a otros usuarios simultáneos o inmediatos del recinto, sino que fomento un modelo de convivencia donde tengo pocas posibilidades de que mi libertad perdure o, dicho de otra manera, muchas de que alguien, ofendido con razón, se atreva a salpicarme una hostia, con lo cual arriesgo además de la libertad mi seguridad. Lo que considero falaz es que a partir de esta pauta elemental de respeto mutuo que, aunque muchos no lo perciban, ayuda a consolidar la libertad en el seno de una cultura, se intenten formular coacciones contra el libre uso o desuso de lo que ocurre de piel para dentro. El tema es prolijo, interdisciplinar y quizá viciado por el fracaso de todos los paradigmas políticos que han presumido de una idea de libertad. Para zanjar esta digresión, añadiré un puntito más de sal a la cuestión: la auténtica libertad comienza cuando uno ya no tiene nada que perder; cuando ya no teme por nada ni nadie, ni siquiera por la vida. Es la apuesta del desesperado y, quizá por ello, lo que muy pocos filósofos se han dignado a explicar: la dinámica de la libertad individual culmina, casi siempre, con la autodestrucción. ¿Qué mejor desenlace para quien se ha tomado la molestia de conocerse, templar sus ánimos y construirse un destino que acabar con todo?...<BR/><BR/>Respecto a tu puntualización sobre mi modo de sufrir la zona azul, decirte nada más que con los impuestos que pago por el combustible y, sobre todo, por circular con vehículos de tracción mecánica, mi cupo en concepto de mantenimiento de calzadas, ocupación del espacio público y compensación por otras molestias urbanas está saldado con creces. En todo caso, cuando ello es posible sin ser ejecutado sobre el asfalto, lo mejor moverse en bici e ir adoptando medios de transporte más autónomos y menos costosos. Las ciudades son insufribles en gran medida por el exceso de coches que contienen, pero la zona azul no es un remedio ni un modo de regular este disparate, sino un negocio redondo para unos pocos a los que desde luego les interesa la proliferación masiva de automóviles. En los casos que conozco, este negocio es la fuente de ingresos paralela de muchos concejales (ya sabes, <EM>h</EM>ay-untamiento), que organizan mafias de recaudación especializadas en cobrarnos indefinidamente por algo que ya hemos pagado y cuyo concepto de libertad (quizá sintonice con el tuyo, no sé) les permite intervenir alegremente nuestras cuentas corrientes en caso de negarnos a aceptar esta forma de asaltar al ciudadano.Autógenohttps://www.blogger.com/profile/06214413583174233270noreply@blogger.comtag:blogger.com,1999:blog-32796015.post-36621171626103326972008-10-19T13:30:00.000+02:002008-10-19T13:30:00.000+02:00Perdón, justo antes de la última frase en negrita ...Perdón, justo antes de la última frase en negrita puse "Pero esa crítica no me parece un -buen- intelectual."<BR/><BR/>Quise decir:<BR/><B>"Pero esa crítica no me parece un -buen- <I>ejercicio intelectual</I>.</B>Sensacioneshttps://www.blogger.com/profile/15835383593350600351noreply@blogger.comtag:blogger.com,1999:blog-32796015.post-46443871989256917702008-10-19T13:21:00.000+02:002008-10-19T13:21:00.000+02:00Sobre el último punto, que a Viandante le ha inter...Sobre el último punto, que a Viandante le ha interesado bastante, creo que merece un comentario aparte. Servidor no está con los <I>prohibicionistas</I>, pero tampoco con la crítica fácil de algo que personalmente no nos interesa. Recuerdo que una vez estuve haciendo cola largo tiempo para coger un autocar. Después de estar en la enorme cola, recién entrado, sentados para un viaje de ¡30 km!, 30 minutos, mi acompañante encendió un cigarrillo. ¡No había tenido tiempo de fumar!, ah, claro, <I>le prestaba fumar sentadito</I>, en un "espacio público". Me parece lamentable la "defensa" de los fumadores, (mal) acostumbrados a fastidiar a todos los demás sin miramiento alguno. Es muy triste que sólo la ley proteja <I>en algunos casos</I> al otro... Es egoísmo puro. Por cierto, el tabaco, perdón, <I>el tabaquismo</I>, el cigarrillo que ha invadido los mercados hace muchos años, es <I>puro consumismo</I>, no tiene nada que ver con una función más o menos <I>ritual</I>, es, desde mi punto de vista, compulsión, alienación...<BR/>Ojo a los "actos de libertad" que enmascaran otra cosa... Libertad va unido a responsabilidad. Ya está bien de ir de víctimas, <I>fumadores</I>, es un puñetero vicio que <I>afecta a los demás</I>. Y no digamos tener que aguantarlo en el trabajo, ¿dónde los derechos...? Libertad, ¡libertad de quién!...<BR/><BR/>Citas el caso de "pagar en zonas azules". Me gustaría saber qué otra forma hay de evitar que nos comamos los unos a los otros... Porque "en libertad", el auto ocupa todo el espacio público. Es contradictorio criticar el mercado -en puridad democracia pura, libertad...- y, al tiempo, defender no sé qué supuesta "libertad".<BR/>Fume en su casa, fume en su coche, fume en un espacio abierto, y deje a los demás en paz..., que ya tienen sus propios vicios...<BR/>El grupo es algo complejo, y es fácil criticar toda medida reguladora, limitadora, cuando no nos "conviene" <I>personalmente</I>... Pero esa crítica no me parece un -buen- intelectual.<BR/><B>¿No requiere algo de autocrítica?</B><BR/>Y repito que, servidor, no está con los salvadores de nadie, de la "salud" o de lo que sea. Pero sí con la auténtica libertad..., que no es algo tan sencillo como parece. Ya ves, "estar en tierra de nadie" es algo muy común a cualquier persona con carácter.<BR/>Ana Karenina empieza con un "Todas las familias ricas se parecen, las pobres, lo son cada una a su manera" Tal vez los "Sin tierra" sean como los pobres.<BR/>Saludos.<BR/>Saludos.Sensacioneshttps://www.blogger.com/profile/15835383593350600351noreply@blogger.comtag:blogger.com,1999:blog-32796015.post-13238251532120952512008-10-19T13:01:00.000+02:002008-10-19T13:01:00.000+02:00Sobre el punto 2, de los "deportistas de élite que...Sobre el punto 2, de los "deportistas de élite que se <I>prostituyen</I> por una causa publicitaria", la verdad es que en nuestra cultura, con tal de obtener beneficio económico, prácticamente cualquier impostura se acepta como <I>normal</I> (¿también beneficia a "otros", como los "actos inteligentes" de Cipolla?..., ¿realmente es fácil delimitar el <I>beneficio</I> o no a los demás?.. ¿Qué "otros", estos, aquellos, los de más allá... El espacio de cipolla es bidimensional, hacen falta ¡como mínimo! tres... Yo con dos no hubiera publicado un libro). Pero lo alucinante es que esas campañas funcionen... En el mundo de los media, me viene a la mente esa historia de la Ana Rosa Q. (me da hasta cosa escribir aquí su nombre...) con el supuesto libro que le escribió un <I>negro</I>, que a su vez plagió otra novela (como finalmente tuvo que admitir, por mor de la denuncia judicial ante las irrefutables pruebas..., y ahí sigue la tía, ¡con <I>crédito</I>! y esa sonrisa de buena gente...). Sin embargo, tienes una obra, un ejemplo de honestidad por tus actos, y una supuesta nota que no se sabe ni de donde sale ni de su fiabilidad ni nada..., con turbios intereses, y recorre el planeta emborronándolo todo -caso Kundera- y cubriendo titulares vergonzosos... Realmente, la lucha por las audiencias se lo come todo...Sensacioneshttps://www.blogger.com/profile/15835383593350600351noreply@blogger.comtag:blogger.com,1999:blog-32796015.post-60098810386966725902008-06-25T21:47:00.000+02:002008-06-25T21:47:00.000+02:00Querido Autógeno, basándome en su respuesta, me im...Querido Autógeno, <BR/>basándome en su respuesta, me imagino que se ha atrevido a preguntarse si su temperamento le dejaría encajar en otra sociedad o en otra época. Desconozco el resultado de tal ejercicio íntimo con su fuero intero. <BR/>Yo me he hecho esa pregunta hace ya muchos soles y estoy segura de que no encajo, ni encajé ni encajaré en ninguna época, ni en ninguna sociedad. De hacerlo dejaría de ser yo. No es cuestión de temporalidades o lugares, creo que es un asunto de naturaleza. No cree? <BR/>La libertad es el don más difícil del administrar. <BR/><BR/>Reciba un amistoso saludo.Viandantehttps://www.blogger.com/profile/10697635351976494703noreply@blogger.comtag:blogger.com,1999:blog-32796015.post-27870513286115661532008-06-25T19:43:00.000+02:002008-06-25T19:43:00.000+02:00Así es, mi querida Viandante, vivimos en una civil...Así es, mi querida Viandante, vivimos en una civilización que pese a sus innegables maravillas (que podamos comunicarnos por este medio lo es) se alza proyectando una sombra creciente de sofisticados tormentos. ¿Cambiaríamos el presente por tiempos pretéritos? ¿Merece el lamento imaginar evasiones imposibles, como aullar de gozo durante un baño de humo en una tienda escita, hace 25 siglos, después de haber cabalgado a lomos de un caballo furioso tras una incursión enemiga cerca del Mar Negro? ¿Verdad que cada vez se encuentran menos correspondencias con el mundo actual y más senderos hacia el exilio interior? Quizá exagere, pero es probable que mi destino radique en no encajar en ningún lugar y que hasta el cuerpo se me escurra como un disfraz cansado...Autógenohttps://www.blogger.com/profile/06214413583174233270noreply@blogger.comtag:blogger.com,1999:blog-32796015.post-46222803406231858512008-06-23T10:41:00.000+02:002008-06-23T10:41:00.000+02:00Querido Autógeno, me reconforta leerte. El último ...Querido Autógeno, me reconforta leerte. <BR/>El último punto que tocas en tu entrada es lo que encuentro quizá más detestable de la ya no tan nueva tendencia gubernamental a controlarlo todo. No me extranha que en pocos anhos recibamos la notificación de que hemos sido "escogidos" para un experimento secreto al que no podemos renunciar, pues al negarnos a participar se nos procese como traidores de la "Patria".Viandantehttps://www.blogger.com/profile/10697635351976494703noreply@blogger.com